En el mundo de la cosmética, existen muchos productos que son perjudiciales para nuestra salud.
Si bien es cierto existe concienciación sobre los ingredientes poco saludables en los alimentos procesados, pero cuando se trata de productos que usamos en nuestra piel existe poca preocupación, ignoramos el daño que le ocasionamos a nuestra salud. Esto se debe principalmente al desconocimiento de la composición de los cosméticos que utilizamos, así como lo dañinos que pueden ser para el organismo algunos productos químicos utilizados por la cosmética industrial. Cualquier producto químico que apliquemos sobre la piel afecta al organismo, va acumulándose toxicidad en el organismo y actúan como disrruptores endocrinos y hormonales. Es un envenenamiento lento que no percibimos.
El uso de la parafina, los parabenos y las siliconas, son muy usados en la cosmética actual, por ser compuestos baratos y fácil de usar, los fabricantes de la cosmética industrial recurren a ellas con demasiada frecuencia, sin importarles que esta sustancia sea un derivado del petróleo.
La parafina es un aceite mineral refinado sub producto del petróleo, es una especie de cera plástica, la que más se usa en cosmética es la parafina blanca, aparece en todo tipo de productos con los nombres de Petrolatum o Paraffinum.
Si aplicamos un producto cosmético con parafina sobre la piel, se forma una finísima capa, que tapona los poros. Lo que parece una piel suave e hidratada no es más que el efecto visual que produce esa lámina plástica que se conoce comúnmente como efecto máscara entre la dermis y el exterior, impidiendo la respiración y la función metabólica y excretora de la piel, ocasionando la acumulación de toxinas, los poros se taponan y se altera el equilibrio hidrolipídico de la piel y cuando retiramos el producto se produce un efecto rebote de sequedad.
La parafina es muy común encontrarla en cremas hidratantes, en bases de maquillaje, barras de labios y en productos de higiene íntimo, que puede ser perjudicial, porque la zona genital tiene un pH propio, que se puede alterar fácilmente.
También deben saber que gracias a la Cosmética Natural, podemos usar como hidratantes en la piel, los aceites esenciales y vegetales, porque son los compuestos que la propia naturaleza ha diseñado para estas funciones, y nuestra piel los va a identificar como una sustancia natural totalmente asimilable y beneficiosa.
Hay una gran variedad de aceites vegetales, que tienen cualidades específicas para cuidar la piel, los hay hidratantes, humectantes, nutritivos, calmantes… la variedad es infinita, podemos mencionar algunos como el aceite de almendras dulce, es naturalmente hidratante, emoliente y calmante, ideal para pieles donde existan afecciones cutáneas inflamatorias o para pieles sensibles con problemas de sequedad, es relajante, alivia la irritación, calma el picor; el aceite de germen de trigo, que mejora la absorción cutánea de nutrientes y contiene mucha vitamina E, que es un antioxidante que ayuda a evitar el envejecimiento prematuro, y ayuda a las pieles maduras a mejorar su estado; el aceite de aguacate, muy rico en vitaminas y minerales que ayuda al desarrollo celular y regeneración de tejido, ideal para personas con poca tolerancia a las sustancias químicas; el aceite de girasol, que por sus componentes estimula la formación de elastina y colágeno, y nos va a aportar una piel firme y suave.
El aceite esencial del árbol de Té, uno de los antisépticos más potentes que hay en la naturaleza, actúa como bactericida, anti fúngico y antiviral; el aceite de romero que tiene propiedades anti inflamatorias, tonificantes y energéticas, beneficioso para el crecimiento capilar y consigue que el cuero cabelludo se fortifique al aumentar el aporte de nutrientes a los folículos pilosos. Además, es muy aconsejable usarlo para tratar los cabellos grasientos así como la caspa seborreica; el aceite de uva rico en ácidos grasos esenciales y la vitamina E, que lo convierten en un ingrediente antiaging, inhibiendo las reacciones perjudiciales en la piel como consecuencia de agente externos como los rayos solares o las inclemencias del tiempo, ayuda a fortalecer y tonificar la piel, y aunado a sus propiedades antiinflamatorias, puede proporcionar beneficios para las personas con acné y problemas inflamatorios cutáneos; el aceite de Jojoba para un mejor cuidado del Cabello y la Barba, limpia a profundidad el cuero cabelludo y promueve el crecimiento del pelo; el aceite de canela activa la circulación para tener una piel firme y suave, aporta elasticidad a la piel, revitaliza y rejuvenece los tejidos, equilibra el pH de la piel, reduce el tamaño de los poros, el enrojecimiento y la irritación; el aceite de Moringa, contiene propiedades antisépticas y antiinflamatorias que ayudan a curar rápidamente pequeñas dolencias cutáneas como heridas superficiales, dermatitis, psoriasis, eczema, hematomas, quemaduras, picaduras, erupciones y rasguños, contiene vitaminas C, E, A, K y complejo de Vitamina B, ayuda a mejorar la salud de la piel y su aspecto. Son muchas las plantas de las cuales podemos beneficiarnos de sus aceites.
Ahora ya sabemos lo perjudicial que son los productos que contienen químicos, como los parabenos, parafinas, siliconas…. Y que podemos sustituirlos por ingredientes naturales y 100% vegetales.
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